Crear tomate frito en casa no solo es una manera deliciosa de disfrutar de los sabores frescos de tu jardín o del mercado local, sino que también es una excelente oportunidad para utilizar envases de vidrio reutilizables y sostenibles.
En este artículo, aprenderás a preparar tu propio tomate frito, paso a paso, y cómo almacenarlo adecuadamente en envases de vidrio, perfecto para todos los entusiastas de la cocina casera y los partidarios de un estilo de vida sostenible.
Ingredientes:
- 2 kg de tomates maduros
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharadas de azúcar (opcional, ajusta al gusto)
- Sal al gusto
- Pimienta negra al gusto
- 100 ml de aceite de oliva virgen extra
- Hierbas frescas al gusto (como albahaca, orégano)
Equipamiento:
- Cuchillo afilado
- Tabla de cortar
- Olla grande
- Batidora o procesador de alimentos
- Colador o tamiz fino
- Frascos de vidrio con tapas (esterilizados)
Preparación:
- Lavar y preparar los tomates: Lava los tomates bajo agua fría. Corta cada tomate en cuartos y retira las semillas si lo deseas (esto es opcional, ya que algunos prefieren dejarlas para conservar la textura natural del tomate).
- Cocinar los tomates: En una olla grande, calienta el aceite de oliva a fuego medio. Agrega los dientes de ajo picados y sofríe hasta que estén dorados. Añade los tomates cortados, el azúcar (si se utiliza), sal y pimienta. Cocina a fuego lento durante 30-40 minutos, revolviendo ocasionalmente. Si se desea, se pueden agregar hierbas frescas como albahaca o orégano para darle un sabor extra.
- Triturar la mezcla: Una vez que los tomates se hayan cocinado y suavizado completamente, retira la olla del fuego. Utiliza una batidora o un procesador de alimentos para triturar los tomates hasta alcanzar la consistencia deseada.
- Colar la salsa (opcional): Para obtener un tomate frito más suave, puedes pasar la mezcla por un colador o tamiz fino para eliminar cualquier trozo grande o semillas restantes.
- Cocinar nuevamente: Regresa la salsa triturada a la olla y cocina a fuego lento durante otros 20-30 minutos, o hasta que la salsa espese a tu gusto.
- Envasado: Mientras la salsa aún esté caliente, viértela cuidadosamente en los frascos de vidrio esterilizados, dejando un espacio de 1 cm desde el borde superior. Cierra los frascos con las tapas correspondientes.
- Conservación: Deja que los frascos se enfríen a temperatura ambiente. Una vez fríos, etiqueta los frascos con la fecha de preparación y guárdalos en un lugar fresco y oscuro. Para una conservación óptima, considera la posibilidad de guardar los frascos en el refrigerador una vez abiertos.
Consejos para el uso de envases de vidrio:
- Esterilización: Antes de usar los frascos de vidrio, es esencial esterilizarlos para eliminar cualquier bacteria. Puedes hacerlo hirviéndolos en agua durante 10 minutos y dejándolos secar completamente.
- Llenado en caliente: Llenar los frascos mientras la salsa aún esté caliente ayuda a crear un sellado hermético al enfriarse, lo que prolonga la vida útil de tu tomate frito casero.
- Reutilización: Los envases de vidrio son perfectos para proyectos de cocina casera como este porque pueden reutilizarse muchas veces, lo que ayuda a reducir el desperdicio y apoya un estilo de vida sostenible.
Preparar tomate frito en casa es una forma maravillosa de disfrutar de los sabores frescos y naturales, a la vez que se aprovechan los beneficios de los envases de vidrio para una conservación sostenible y de larga duración. Con estos pasos simples, podrás crear una salsa deliciosa que será la base perfecta.